Hasta el ultimo suspiro

-Tantos años- dijo el viejo en su agonía –tantos años mí viejita, tantas risas y tantas lágrimas… y sin poder decirte tantas veces que te amaba, más por pura cobardía que por ganas; tantas veces que te hice sufrir y soportaste mis maltratos y mis gritos, “aquí mando yo pues soy el hombre” te vociferaba, hasta que me enseñaste que eras tu el sexo fuerte, que sin ti yo no era nada; ese día caí enfermo, con temperaturas elevadas desperté y no me podía mover, pensé que moriría en ese instante, y sentía las ganas de besarte, pero nada de eso paso, al contrario, ahí estabas tu cobijándome con una frazada y diciéndome “ya, ya amorcito, todo estará bien, no hagas esfuerzo aquí estaré”, pusiste tu mano en mi cabeza y acariciaste mis cabellos “ya, ya amorcito”… ese día llore como un crio, me di cuenta de lo tonto que había sido y me propuse a que si salía de esta te trataría como una reina, y así lo hice y así lo intente, complacerte era ahora mi único deber y recibir tu recompensa era mi mayor placer; y si amor mío, te ame como un loco, y aunque no era perfecto yo se que tu me amabas, a mi y a mis defectos; si mi viejita aun me regañabas, “baja la tapa de excusado”, “que te cuesta ser amable con los vecinos”, “así eras tu de crio, inaguantable, se mas dulce con los niños viejo necio y amargado” esos eran tus regaños, y aunque mala cara ponía por dentro me satisfacía, pues sabia que me amabas y eso era lo único que me importaba; tantos años mi viejita, mas de lagrimas que de alegría, lo se, me di cuenta muy tarde, y me duro muy poco el gusto de disfrutarte; pero no viví arrepentido, te había dado en poco tiempo el olvido que de tantos años anhelaste, pude darte las sonrisas que tantos años ocultaste; y ya lo sabia amada mía que este día llegaría, el día en que regresarías por mi, y ahora estas parada aquí, en el marco de la puerta, viéndome con esos ojos llenos de ternura, los mismos que me cuidaron aquel día, los mismo que me enamoraban cada mañana; pasa mi amor, te he estado esperando, pasa cielo mío, te has tardado, ¿algo te ha demorado?-

Luna Volkova